Los procesadores de alimentos permiten picar, rebanar, triturar y hacer puré con sólo pulsar un botón. Son una herramienta inestimable para cualquier cocina.
Puede utilizar un procesador para hacer salsas, sopas y pan rallado, pero el uso más común es hacer carne picada o pesto.
Es posible comprar un modelo barato, pero merece la pena invertir en uno bueno, ya que obtendrá mejores resultados y le durará más tiempo.
Los principales factores a tener en cuenta a la hora de comprar un procesador de comida son el tamaño, la durabilidad y la facilidad de uso.
También es importante tener en cuenta qué otros utensilios quieres utilizar con él, como un rallador, así como el espacio del que dispones en tu cocina.
Los procesadores de alimentos permiten picar, rebanar, triturar y hacer puré con sólo pulsar un botón. Son una herramienta inestimable para cualquier cocina.
Puede utilizar un procesador para hacer salsas, sopas y pan rallado, pero el uso más común es hacer carne picada o pesto.
Es posible comprar un modelo barato, pero merece la pena invertir en uno bueno, ya que obtendrá mejores resultados y le durará más tiempo.
Los principales factores a tener en cuenta a la hora de comprar un procesador de comida son el tamaño, la durabilidad y la facilidad de uso.
También es importante tener en cuenta qué otros utensilios quieres utilizar con él, como un rallador, así como el espacio del que dispones en tu cocina.